Rito Escocés Antiguo y Aceptado
Grado Sexto - Secretario Intimo - Maestro por Curiosidad o Maestro Inglés
Decoracion
1965, Mexico
Cualquiera sala sirve para los trabajos comunes. Pero si se trata de
iniciación, se procura darle una forma circular con el cortinaje rojo que cubra
los muros. Habrá un solo trono en Oriente, con dos espadas y dos asientos: el
de la izquierda para el Doctísimo Maestro, que representa a Salomón, con el
titulo de SAPIENTÍSIMO MAESTRO, y el de la derecha para el Gran Orador, que es
Hiram II, rey de Tiro, con el de PODEROSO REY. Debajo del solio un cuadro con el
símbolo del grade y en la mesa el Cetro de ébano, la Espada, los Reglamentos,
y tantos collares y mandiles del grado como aspirantes.
En el Altar de los juramentos, vestido de rojo como todo lo demás, estarán
las Letras Capitulares o la Dispensa, que faculta para los trabajos; sobre un
cojín de lujo, y encima de ella, un triángulo de oro y la espada flamígera.
En Occidente dos sillones: el que está a la derecha del Jefe, para el
Capitán de Guardias, que es el Primer Gran Vigilante, y el de la izquierda para
el Teniente de Guardias, que será el Segundo Gran Vigilante. En los
semicírculos, sillas para los concurrentes. En fin, el Guarda de la Torre, que
se llama Centinela, tendrá su asiento junto a la cortina que separa la
Audiencia de la Cámara de los Guardias de Salomón.
Esta antesala será en atrio cubierto de verde o azul, la alumbrara una sola
lámpara y no tendrá ningún asiento. La ocuparan durante cierto tiempo de la
ceremonia, los dignatarios y concurrentes. El aspirante representa a Hohaben, el
mas fiel amigo de Salomón, y cuyo nombre significa "Hijo de Dios".
Las insignias del Grado son: collarín carmesí que sostiene la alhaja, o sea
el triangulo de oro, y mandil blanco con orilla roja, en cuya solapa se borda el
pico, la palanca y la mandarria.
Preliminares de la Apertura
Cada uno ocupa el lugar que le corresponde, sentándose en Oriente el
Porta-Estandarte, junto al Muy Sabio Maestro, y los demás como en Logia
Simbólica, excepto los Grandes Vigilantes, que estarán ambos en Occidente.
El Sapientísimo Maestro da un golpe con el cetro y dice:
Sap\ M\ :
Trato, hermanos, de abrir la audiencia de los Maestros, y os doy gracias por
vuestra concurrencia.
¿Cuál es vuestro deber en este caso, H\ Capitán
de Guardias?
Cap\ de G\ :
Ver si estamos libres de espionaje, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ :
¡Servios hacedlo así, Q\ H\
!
Cap\ de G\ :
¡Inquirid si estamos exteriormente cubiertos, H\
Teniente de Guardias!
Ten\ de G\ :
¡Centinela! ¡Ved si estamos libres de espionaje!
Este se levanta, se asegura de que no hay nadie en la Cámara de los
Guardias, que la puerta y la llave están corrientes; examina el vestíbulo,
ordena al Guarda exterior la vigilancia, cierra, da seis golpes, a los que aquel
responde, y luego da uno; saca la espada, entra en la Audiencia y dice antes de
sentarse:
Cen\ : La Audiencia está a cubierto
exteriormente, H\ Ten\ de
G\ .
Ten\ de G\ :
Estamos libres de espionaje, H\ Cap\
de G\ .
Cap\ de G\ :
¡Podemos proceder, Sapientísimo Maestro!
Sap\ M\ :
¿Cuál es vuestro deber ahora, H\ Teniente de
Guardias?
Ten\ de G\ :
Reconocer con el Capitán a todos los presentes, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ :
¡Servios, mi Cap\ y Ten\
de Guardias, pedir cada uno en vuestro Valle el toque y palabras a todos los
presentes, y prended al curioso que trate de sorprender nuestros misterios!
Ten\ de G\ :
¡No hay curiosos en mi Valle, H\ Capitán de
Guardias!
Cap\ de G\ :
¡Todos somos Secretarios íntimos, Sapientísimo Maestro!
Sap\ M\ :
¡En ese caso, pongámonos las insignias!
Todos lo ejecutan. En seguida el Sapientísimo Maestro preguntará sus
deberes a los Dignatarios como en Logia, y estos responderán de pie y al orden.
Así que se convence de que están bien instruidos, da un golpe con el cetro y
precede a la apertura de la Cámara.
Apertura de la Cámara
Sap\ M\ :
¿Para qué nos reunimos, H\ Cap\
de Guardias?
Cap\ de G\ :
Para reconocer las miserias del Pueblo y penetrar sus causas.
Sap\ M\ :
¿Cuál es la mas poderosa, H\ Ten\
de G\
Ten\ de G\ :
La Ignorancia, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ :
¿Y cuál es el sentimiento dado al hombre para salir de ella H\
Capitán de Guardias?
Cap\ de G\ :
El deseo de saber, o la CURIOSIDAD.
Sap\ M\ :
¿Cómo la excitaremos, H\ Ten\
de G\ ?
Ten\ de G\ :
Demostrando que a ella se deben todos los progresos de las Ciencias 7 Artes, y
el grado de civilización que hoy alcanza el linaje humano.
Sap\ M\ :
¿Cuánto tiempo destinamos a tan útil ocupación, H\
Capitán de Guardias?
Cap\ de G\ :
Desde la hora séptima a la nona, pues empleamos las demás en la práctica de
los principios que establecemos.
Sap\ M\ :
Que hora es, H\ Teniente de Guardias.
Ten\ de G\ :
Las siete en punto.
Sap\ M\ :
¡Servios, HH\ Cap\ y Ten\
de Guardias, anunciar en vuestros Valles respectivos, como yo en Oriente, que
para cumplir nuestros fines voy a abrir la Audiencia de Maestros!
Cap\ de G\ :
¡HH\ Ten\ de Guardias y
demás que decoráis mi Valle, de orden de nuestro Sap\
M\ os anuncio que va a abrir la Audiencia de los
Maestros!
Ten\ de G\ :
HH\ que decoráis mi Valle, de orden de nuestro Sap\
M\ os comunico que va a abrir la Audiencia de
Maestros,
¡Anunciado, H.'. Capitán de Guardias!
Da un golpe con el puño de su espada.
Cap\ de G\ :
¡Anunciado, Sapientísimo Maestro!
Da seis con el cetro en su trono, que repiten el Cap\
y el Ten\ de Guardias, y dice el Sap\
M\ : ¡En pie y al orden, hermanos!
Todos lo ejecutan.
Sap\ M\ : A
la G\ D\ G\
A\ D\ U\
, bajo los auspicios de los SS\ GG\
II\ GG\ del 33° y último
grado del Rito Antiguo y Aceptado Escocés, reunidos en Supremo Consejo para ...
y en virtud de la autoridad que me ha conferido el Sob\
Cap\ Rosa-Cruz... ¡declaro abiertos los trabajos de
la Audiencia de los Maestros! ¡A mi hermanos!
¡Por el signo! Todos hacen el de saludo,
Por la bateria ¡La dan!
Todos.: ¡Hoshea, Hoshea, Hoshea! (Significa,
"Salvador".)
En seguida se ordena sentarse; se anuncia, lee y sanciona la columna grabada
de la sesión precedente, se despachan los negocios de familia, se recibe a los
Visitadores, y si hay iniciación se proponen los candidatos. Para proceder a
ella, el Sapientísimo sentará al Gr\ Orador a su
derecha y todos los demás pasarán a la Cámara de los Guardias.
Iniciación de los Candidatos
El Gran Maestro de Ceremonias despoja a los candidatos de todas las insignias
y armas, colocará a uno de ellos en la puerta de la Audiencia, que queda
entreabierta o reemplazada por la cortina, con las manos cruzadas en la actitud
de un hombre que escucha y observa lo que hacen Salomón e Hiram, que estarán
conversando.
Poco tiempo después los Guardias hacen ruido; lo que obliga a Hiram a mirar
hacia la puerta, y al ver al curioso exclama:
Pod\ Rey.: ¡Cielos, nos escuchan!
Sap\ M\ :
¡Imposible; los Guardias cuidan de la puerta!
El poderoso Rey se lanza a ella, se apodera del curioso y le arrastra
diciendo:
Pod\ Rey.: ¡Aquí le tenéis; mirad
quien es!
Sap\ M\ :
¡Oh Señor, Dios mío; mi amigo Johaben!
¿Qué haremos de el?
El Poderoso Rey toma la espada, que está en el trono, y haciendo el ademán
de atravesarle el corazón, responde:
Pod\ Rey.: ¡Su indiscreción merece la
muerte!
Le detiene y dice el
Sap\ M\ :
¡Suspended un momento vuestra justa cólera, Poderoso Rey! No le condenéis sin
oírle. ¿Que hacíais ahí, Johaben?
El Gr\ M\ de Cer\
, que habrá entrado sin ruido, responde por
Johaben: Temia por vuestra vida al veros con un extranjero tan
irascible, y vigilaba mientras los Guardias se divertian.
Si hay más de un candidato, le hace la pregunta siguiente:
Sap\ M\ :
¿Venis solo?
Gr\ M\ de Cer\
: Tantos amigos fieles le acompañan.
El S\ M\ da un golpe
con el cetro; el Cap\ de G\
entra, y saluda.
Sap\ M\ :
¡Prended a los curiosos que están en el atrio, y conducidlos a nuestra
presencia para juzgarlos!
Se ejecuta y todos los guardias entran con los aspirantes, los colocan entre
el Oriente y el Altar y se alinean detrás de ellos. Pero si no hay más que un
aspirante, todo esto se suprime; al decir el Gr\ M\
de C\ vigilaba, mientras los guardias se divertían,
el Sap\ M\ da un golpe con
el cetro, los GG\ entran, saludan y se alinean
detrás del candidato.
Sap\ M\ :
Vuestra imprudencia ha sido grande y mi amigo el Poderoso Rey Hiram Segundo pide
contra vos pena de la vida; pero el es justo, y como ninguna Autoridad debe
condenar a otro por las apariencias, y menos aun sin oírle, responded, Johaben.
¿Por que habéis permanecido aquí al ver que no se necesitaba de vuestros
servicios?
G\ M\ de C\
: Porque al oír que se trataba de las Miserias del pueblo, se
excitó su curiosidad y le hizo olvidar que no se le había llamado a esta
Audiencia.
Sap\ M\ : La
intención constituye la culpa, cuando no es dañada no hay delito. Vinisteis
para defenderme y sin querer sorprendisteis nuestro secreto, lo que cambia la
naturaleza del acto. Mas confesáis que la curiosidad os detuvo, bien que no
tuviera fines maliciosos. Antes de sentenciaros, decid:
Sap\ M\ :
¿Que entendéis por curiosidad?
Pregunta sucesivamente a cada aspirante
Así que han respondido, dirigiéndose a los Guardias los dirá:
Sap\ M\ :
Cap\ y Ten\ de Guardias,
apoderaos de esos curiosos, sacadlos de la Cámara, y traedlos cuando se os lame
para que oigan su sentencia.
Todos salen y dejan la puerta abierta.
Después de un corto rato de hablar con Hiram en voz baja, Salomón da un
golpe, y entran de nuevo, se acomodan como antes y al levantar aquel el cetro
los GG\ bajan las espadas, dejan a loa candidatos
entre los Valles con el Gr\ M\
de Cer\ y ellos ocupan sus asientos respectivos.
Sap\ M\ : HH\
míos: el Rey de Tiro, mi aliado, ofendido de que hubiéseis entrado en esta
Audiencia sin que se os llamara, quería castigaros de un modo ejemplar: su
resentimiento era justo, porque espiar a otro para sorprender su secreto es
robarle su propiedad y atacar uno de los derechos naturales del hombre; pero
considerando ya que no ha sido esa la causa que os ha excitado a tan atrevida
acción, sino que temías por mi vida, que solo para estar prontos a defender no
oísteis, y que graduados de Maestros Perfectos conocíais nuestro Circulo y el
fin de nuestra discusión, lo que excusa vuestra permanencia y la curiosidad que
os impidió retiraros, he intercedido por vosotros; y como hemos hecho una nueva
alianza y dándonos reciprocas promesas, además de perdonaros, he conseguido
que seáis los Secretarios Íntimos de la nueva negociación y de los acuerdos
que habéis sorprendido y tenemos que llevar a cabo. Seréis enviados a
investigar hasta dónde llega la miseria que, según informes de mi amigo Hiram,
reina en alguna de mis provincias, así como sus causas y la manera de
remediarlas.
¿Os sentis capaces de guardar inviolables los secretos que es necesario se
os confíen?
Johaben: Si, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ : En
ese caso, H\ Maest\ de Cer\
, dadle asiento.
Lo ejecuta sentando en el centre a los aspirantes.
Sap\ M\ : HH\
míos; si habéis meditado el orden ascedente de la instrucción masónica,
comprenderéis que tres son los juntos fundamentales que nos proponemos
alcanzar: conocimiento del hombre, conocimiento de sus deberes y derechos,
conocimientos del modo de hacerlos efectivos. El primero se adquiere en las
Logias simbólicas. El segundo en las Cámaras Capitulares. El tercero en las
Concejiles. Tal es el significado del triangulo, y por eso le veis en nuestro
Altar en vez de la escuadra y el compás de las Logias azules. No hay ciencia ni
principio moral, filosófico, social o político, extraño a nuestras
investigaciones. Cuanto se ha hecho en adelanto y beneficio de la civilización,
se revisa, se acrisola y se formula en nuestras Cámaras, para que nuestros HH\
lo estudien, desenvuelvan y perfeccionen. Así, cada grado es más interesante,
mas instructivo y satisfactorio que su precedente; y como no hay progreso alguno
que no se deba a la curiosidad, fundamos esta Audiencia, elevando Maestros
Perfectos a Maestros por Curiosidad, y para excitarla les mostramos
prácticamente que deben arriesgar la vida para aumentar sus conocimientos pues,
según la tradición, esto fue lo que premio el Monarca Israelita en Johaben su
favorito.
Voy a leeros la historia compuesta para este grado Antes de la fabricación
del Templo, el Rey de Tiro, Hiram Segundo y Salomón, hicieron un trato, cuyas
estipulaciones cretas solo ellos conocían. Hiram se comprometió a dar el
dinero que faltaba, las piedras de Tiro y los cedros de Líbano, así como los
mejores operarios y mas celebres arquitectos de su país, y Salomón a cederle
veinte ciudades de Galilea en cuanto la obra se concluyese. Cumplid el primero
las condiciones, y acabada aquella pasó a visitar una por una las Ciudades que
debía recibir entonces. El estado de degradación en que las hallo, su
territorio inculto y la miseria de sus habitantes, debida al abandono en que
Salomón las tenia desde que hizo el convenio, limitándose a cumplir la letra y
no el espíritu de la cesión, asombraron a Hiram, para quien seria una carga en
vez de un pago; y sin prevenir al Monarca Israelita se dirigió de incógnito a
Jérusalem, y penetró en el cuarto en que el se hallaba. Los guardias al ver
que Salomón le recibía con los brazos abiertos, se alejaron por prudencia y
siguieron sus diversiones. Pasados los saludos, Hiram hizo sus relaciones, afeó
al Rey su comportamiento con toda la violencia de su corazón, y Johaben, que
apercibid de lejos los extraños ademanes del desconocido, se acercó
pausadamente, abrió mas la puerta, se preparó a lanzarse en defensa de su
Soberano y escuchó lo que decian, para obrar como lo requiriesen las
circunstancias.
Apercibiólo Hiram, y admirado de aquel atrevimiento sacó su espada para
castigar tan audaz curiosidad. Felizmente Salomón le detuvo y le calmó
diciéndole que Johaben era el hermano que mas estimaba en la corte por su
fidelidad, instrucción y deseo de saber; que era su confidente particular y el
que poseía todos los secretes de su reino. Después de una corta discusión le
elevaron a Secretario Intimo de su nueva alianza. (Archivo del Templo).
Tres personajes simbólicos, el amado, el elevado y el hijo de Dios, o
Salomón, Hiram y Johaben, se reúnen para investigar las causas y estudiar el
modo de destruir la miseria de los pueblos, y constituyen la Junta civilizadora
de la AUDIENCIA DE LOS MAESTROS. Son Osiris, Isis y Horus, divinidades que
personificaban en el antiguo Egipto los fenómenos de la naturaleza: Creación,
Combinación y Regeneración; y los problemas sociales del origen, pasión y
renacimiento de las naciones.
Los que se afiliaban, y la gran mayoría de los que hoy se afilian en nuestra
Institución, son iniciados en el nombre, a quienes se dice en los necios
rituales que corren por el mundo, que Salomón hacia construir una bóveda
subterránea con la mandarria, el pico y la palanca, símbolos del grado, para
depositar el tesoro inestimable de la Masonería, y que en ella se entregaba con
Hiram Segundo al estudio de las relaciones del alma con Dios, por lo que
condenaban a muerte al que los oía.
Aquellos instrumentos simbolizan el Trabajo que remedia las miserias, crea
las ciencias, sublima la virtud, y sacara al hombre de la ignorancia y del
oprobio en que permanece; y si la verdad y la razón no lo consiguen, esos
mismos instrumentos que sirvieron para abrir la tierra, levantar ciudades y
construir el Templo de la Sabiduría, lograran su salvación, pues con la mandarria pulverizara los ídolos de la Ignorancia, con el pico
destruirá la Hipocresía, aunque se guarezca en las rocas; y nuevo Arquímedes,
con la palanca desplomara los palacios de la Ambición para que no vuelvan a
fabricarse.
No ha faltado quien, para explicar los tres instrumentos del símbolo, en la
creencia de que este grado perteneció a la Logia, agregara un ataúd de su
invención, y supiese que contenía el cadáver de Hiram Abif, diciendo que la
mandarria servia para clavar el féretro, el pico para abrir la fosa, y la
palanca para echarle en ella.
Notareis que en todas las leyendas de este grado se sublima la Curiosidad,
que fue la que excito a Hiram Segundo a recorrer Galilea, y la qúe se excuse en
Johaben. Por eso os pregunte lo que entendíais por ella, cuando se os
sorprendió en la Audiencia. Bien diferente del espionaje, vicio propio de almas
viles, la curiosidad es el excitador vivificante, i pasión divina que ha creado
las artes, simplificando su procedimiento y multiplicando sus beneficios. Por
ella distinguimos la causa de los efectos, salimos victoriosos de los males
físicos y acallamos los sufrimientos morales. Aquí nos reunimos para emplearla
estudiando las miserias del pueblo, como lo hacían Salomón, Hiram y Johaben.
¿Podríais a semejanza de el llamaros Secretario Intimo, si para investigarlas
no os estimulara el ansia de comprender lo que sufre el pueblo?
Revisad la historia del progreso humano, y veréis que, como se os ha dicho
otras veces, no es el error su mas terrible enemigo; es la APATIA, y contra
esta, la CURIOSIDAD es el único sentimiento. El error puede cegar al ignorante,
que de nada duda; pero como cada error tiene una realidad por objeto, a los
amantes del saber los inducirá a buscar pruebas y sus trabajos los elevaran al
conocimiento de lo cierto.
Apatía y Curiosidad son términos contradictorias, y el que busca hace
siempre descubrimientos que le indemnizan con usura de sus penas y extravíos
anteriores. Para convencernos de lo uno y de lo otro, decid, ,»que error se vio
nunca mas generalizado que el de los inteligentes de la Edad Media, que creían
posible hacer oro descomponiendo y combinando distinto cuerpo? Pues a el se debe
la Química, esa ciencia tan exacta como ilimitada en útiles aplicaciones. Y
tan lejos esta el error unido a la curiosidad de ser la causa de nuestros males,
que sin desviarme de ejemplo os probare que la civilización moderna trae su
origen del descubrimiento de la pólvora, como lo aseguró hace cinco siglos su
inventor el celebre alquimista Berhold Echawatz, monje franciscano de Friburg,
en Alemania, que la extrajo de su alambique en vez del oro que buscaba.
El pueblo dio a su celda el nombre de "Arca de Satanás", y se le
tuvo por mal compañero y mal fraile. Castigado un dio tras otro por su
curiosidad científica en descubrir la piedra filosofal, sufría la corrección
y quedaba incorregible: ¡Eureka, Reverendo Padre! dijo un dio altivamente a su
prior; vengo a pediros dos cosas: mi libertad y mi secularización.
El prior dio un salto como si le hubiera mordido una serpiente.
¿Vuestra libertad? ¿Olvidais sin duda vuestros votos? ¿Vuestra
secularización? ¡Pedidla al Papa! : No, dijo Berthold, Dios me ha llamado a
cambiar la faz del mundo, a modificar, transformar o destruir todas las leyes
existentes, toda la política, toda la institución humana, Yo acabare con el
espíritu
guerrero de las naciones, y la Ciencia y la Verdad reinaran en el Universo. Y
al ver que su prior le tomaba por un loco, señaló con el dedo el reloj de
arena próximo a vaciarse y dijo: Ese instante que queda, le consagro por ultima
vez a cumplir mi voto de obediencia. ¿Me concedéis mi solicitud?
¡No! fue la RESPUESTA Cayo el ultimo grano de arena, y mas rápido que el
rayo, Schwartz saca de su manga un cartón embreado. con una mecha en la punta,
le aproxima a la lámpara que ardía perpetuamente sobre la imagen de San
Francisco, se oye una horrible detonación, los muebles de la celda bambolean,
los vidrios se deshacen en polvo refulgente, el piso se estremece, y un humo
negro, denso y sulfuroso como si saliera del infierno eclipsa los rayos del dio.
El viejo prior, espantado del prodigio, cayo de rodillas, y apretando con su
boca la cruz de su rosario: ¡Vete! ¡Vete! ¡Vete! ¡hermano Berthold!:
exclamó con terror y convulsivo: ¡Vete; la casa del Señor no puede ser la
tuya! Y Berthold fue a Italia, y cargado de oro y dignidades, Venecia lo envió
a sus ejércitos. Un griego de Corinto, Perdiceas, aplico la pólvora a la
culebrina, y desde 1380 se invento la artillería.
Todo el mundo era antes militar; ¿quien lo es ahora? Las guerras eran
incesantes en todos los pueblos y naciones; ¿quienes son los que hoy pelean?
Sabéis que los dos azotes mas terribles son la Guerra y la superstición, esos
hijos primogénitos de la Ignorancia. Todos los pueblos no educados han tenido
siempre el Valor por la mayor de las virtudes; no el valor moral digno de
aplauso, sino el valor material que poseemos como el bruto. Los poetas
divinizaron en Vulcano al primero que fabrico instrumentos de guerra, y Hornero
sólo canta el valor y la astucia de sus héroes. Ser el más diestro en el
manejo de las armas que conocían; o el mas valiente, era el colmo de la
ambición. El hombre de talento o de esperanzas cifraba su orgullo en ser
militar, y todo el que se tenia por libre era soldado. El clero mismo empuñaba
la lanza, y los obispos y abades dirigían legiones de guerreros. Ninguno se
dedicaba a las ciencias: leer y escribir eran oficios que abrían a la plebe las
puertas del Santuario o de los banquetes, para gloria a Dios o cantar las
hazañas del guerrero. La imaginación se enaltecía y la- raz6n se anonadaba, y
el mas sabio del sacerdocio era un controversista que agotaba su inteligencia en
necias especulaciones. Pero la pólvora hizo de un hombre mil, anulo el valor
del adalid, su energía y su destreza. El más débil y cobarde podía matar al
mas fuerte y mas valiente; y como eran tan costosas, la pólvora y las nuevas
armas, y tan difícil el manejo -del arcabuz y la artillería, para no perder
los hombres amaestrados y el dinero invertido, se crearon los ejércitos
permanentes. El militar dejó de ser un héroe en cuanto fue asalariado, y el
más grande, el mas fuerte de los príncipes era el que tenia mas dinero para
comprar mas soldados. ¿Que hicieron entonces los nobles, los ricos, los
ambiciosos y la gran masa del paisanaje, que se avergonzaba de vivir a expensa
ajena? La curiosidad que prestigio con la pólvora la arrogancia militar, los
excitó al estudio, a las artes, a todas las industries; se cultivo la
inteligencia, y comenzó la civilización que Smith, Foulton y Morse han
sublimado. ¡Decidme si la Pólvora, la Economía Política, el Vapor y el
Telégrafo se conocerían sin la curiosidad!
Como ella constituye el carácter general de la nación inglesa, que no
perdona medios de hallar los secretos artísticos y científicos, se da
moderadamente al grado el nombre de Maestro Ingles. ¿Qué hubiera sido Newton
sin la curiosidad, o sin esa pasión de saber la Verdad que nos guía en el
camino del progreso? ¿Que Locke, ni Bacon? El país que ha producido personajes
tan incomparables, es digno de dar su nombre a esta Cámara de la Masonería
Escocesa. Alcanzó la cumbre de la gloria con Adam Smith, espíritu
investigador, su curiosidad infatigable le indujo a estudiar el origen de la
riqueza de las naciones, y a su obra publicada en 1776, debe el mundo la paz y
el grado de civilizaci6n en que hoy le vemos.
Nadie en la tierra ha heho tanto bien a la Humanidad como aquel sublime
escritor; y nosotros, discípulos suyos, nos vanagloriamos en llamarle Maestro y
en proclamar sus doctrinas y generalizarlas. Pero no olvidéis que Adam Smith no
hubiera podido jamás elevarse a tal altura, si otro hombre no le hubiera
preparado el camino cuatro siglos antes. Imitémosle nosotros, ocupémonos de
aplicar atentamente nuestra curiosidad a los misterios de este grado.
Interrogatorio
Decid, H\ … ¿Qué entendéis por MISERIA DEL
PUEBLO?
Así que han respondído sucesivamente los aspirantes, les dirá la
RESPUESTA: Llamamos miserias del pueblo a sus padecimientos
físicos y morales, sin barbarie, que se opone a que utilice los recursos que
están a su alcance, o su envilecimiento, que es la mas fatal de todas, puesto
que pierde por el los derechos. Un pueblo inteligente sufre y tiene conciencia
de sus males; el bárbaro los ignora, y el envilecido hace gala de su sambenito,
se sumerge cada día mas y mas en la degradación, y como loco que, cubierto de
jirones se cree rico, omnipotente, mueve a lastima a los que le observan. El
hombre; HH\ míos, es semejante al bruto como materia
y a Dios como ser inteligente, y si abjura de su dignidad goza como aquél
viviendo su vida animal, explotando y siendo explotado; mas si prefiere el
honor, muere antes que sufrir el yugo. Esto lo sabían y expresaban los antiguos
en su alegórico lenguaje.
Dígalo la encantadora Circe convirtiendo en cerdos a los compañeros de
Ulises, y la apoteosis que elevaba a Héroes o semidioses a los que seguían los
principios opuestos.
Sap\ M\ :
¿Cuales son las causas más poderosas de estos males?
Contestan de igual modo los candidatos.
RESPUESTA: La educación defectuosa y los vicios del poder constituido.
Sap\ M\ : ¿Qué
diferencia halláis entre CIVILIZACION y EDUCACION, H\
...?
RESPUESTA: La primera es el medio, la segunda es el fin. La civilización
pasa por diversas fases según los pobladores van adquiriendo nociones exactas
de los deberes de cada uno; no alcanzan la educación sino cuando saben el modo
de hacerlos efectivos. Así una nación puede estar civilizada y no educada.
Para comprender la evolución del entendimiento, es indispensable no separar
su estudio del Universo. El amor a lo infinite, lo maravilloso, lo sintético y
lo deductivo, Se enlaza con los peligros físicos de la civilización, y crece
con el sentimiento de la impotencia de nuestros esfuerzos para destruirlos;
mientras que el amor a lo infinite, lo escéptico, lo analítico y lo inductivo
se deriva de la convicción del poder de nuestros recursos para dominar la
naturaleza. En la India, el Brasil y el Anahuac, todo conspire a deprimir la
dignidad humana, el terror hizo monstruos a los dioses. En Grecia y Roma todo
tendía a sublimarla, y Dios fue el hombre poetizado.
Sap\ M\ :
Decís bien, hermano, y nos felicitamos por hallarnos en época positiva. Hoy
las escuelas teológicas y metafísicas ofrecen al sabio el cuadro lastimoso de
religiones contra religiones, filosofías contra filosofías, sin que ninguno de
sus maestros convenza a sus antagonistas a pesar del esfuerzo que le inflama.
Por fortuna, ha mucho tiempo que renunciaron al dominio de las ciencias físicas
o materiales, como indignas de su consideración, o porque no se doblegaban a
sus fantásticas hipótesis; libres estas de su yugo, entraron en el camino del
progreso; mas dejaron torpemente fuera de su área el fenómeno tan complexo,
gigantesco y espinoso de las asociaciones humanas, y vemos naciones que culminan
en las ciencias y artes que ignoran los elementos de la primera de todas, la que
asegura el cumplimiento del deber y el ejercicio del derecho.
La Masonería escocesa ha procurado llenar este vacío, y su estudio
compendioso del mundo inorgánico y del orgánico y vivo, no acudiendo jamás al
dato de una intervención sobrenatural, hace de las ciencias materiales y
sociales una filosofía positiva y saca de ellas el arte maravilloso de
garantizar el deber y afirmar el derecho.
¿De que dependen los grados de civilización de los distintos países que
brillan en el mundo y los cambios de modificaciones que aquella experimenta?
RESPUESTA: De tres causas: primera, la suma de conocimientos que
poseen sus hombres mas hábiles; segunda, la dirección que dará a sus
estudios, o la materia a que se refieren sus conocimientos; y tercera, su
generalización en las masas y la libertad con que se difunden en ellas.
Sap\ M\ :
¿Y que entendéis por Orden, H.'....?
RESPUESTA: Lo que asegura la tranquilidad publica, garantizando a
todos el ejercicio de sus derechos y el cumplimiento de sus deberes.
Sap\ M\ :
¿Puede haber deberes sin derechos?
RESPUESTA: Eso es un contrasentido, porque el deber supone la
existencia de un derecho y viceversa, y como los unos y los otros nacen de la
Naturaleza, son recíprocos los deberes y derechos.
Sap\ M\ :
Decid, H\ ... ?como influyen la fertilidad del suelo,
el clima y los fenómenos naturales que amenazan sin cesar la vida, en la
civilización de las naciones?
RESPUESTA: La fertilidad del suelo, siendo excesiva, satisface las
necesidades con poco trabajo, y como este es el que desarrolla las facultades
del hombre, según se demostró en el grado de Compañero, la gran masa vegeta y
vive al arbitrio de los que saben explotarla, como sucedió en la India, en
Egipto y en el antiguo México, Brasil y Perú. Un clima demasiado riguroso
obliga a ocuparse únicamente de la existencia material, lo que se opone a todo
progreso. Mientras el templado, cuyo suelo requiere la industria humana para la
producción, estimula nuestras facultades, despierta nuestros deseos, nos da a
conocer lo que somos, o lo que podemos, y nos encamina al Progreso y a la
Libertad. Finalmente, en los lugares sembrados de volcanes, sacudidos por
terremotos, rodeados de montanas inaccesibles, y donde el hombre no ve mas que
su pequeñez en todas partes, la imaginación se desarrolla en la misma
proporción que la razón se desvanece; y los pueblos serán fanáticos y serán
poetas, pero no serán jamás libres si se abandonan a si mismos. Este influjo
local preside igualmente en sus creencias religiosas, en su literatura,
preocupaciones y supersticiones, de una manera tan marcada, que un hombre de
talento puede describir los rasgos principales de la historia de una nación por
el lugar que ocupa y su relación con las vecinas, seguro de que lo que diga se
verá confirmado por la tradición o por los descubrimientos sucesivos.
Sap\ M\ :
¿Cuando principia la verdadera CIVILIZACION de un país, H\
...?
Responden lo que saben.
RESPUESTA: Cuando se ha acumulado la riqueza; esto es, cuando
están cubiertas las necesidades materiales.
Sap\ M\ :
Resumid las causas mas poderosas de las Miserias del Pueblo, hermanos...!
RESPUESTA: La educación defectuosa, los vicios del poder
constituido y las condiciones materiales del país son las que prolongan la
ignorancia y se oponen al Progreso.
Sap\ M\ :
¿Y que entendéis por Progreso, H\ ?
RESPUESTA: El adelanto de los conocimientos de la naturaleza de
las cosas. Ese adelanto aumenta según nuestra razón se desarrolla; y así,
cada idea, cada ciencia, cada rama del saber humano ha sufrido tres
metamorfosis: la primera fue necesariamente ficticia o teológica, porque
hallándose en sus albores, sólo nos guiaba el sentido intimo de la Conciencia
en el mundo que desconocíamos, y sin otro maestro para distinguir lo bueno de
lo malo, lo justo de lo injusto; la inteligencia, a concebir la Causa de las
causas, atribuyó al Creador, no solo los primordiales hechos, sino también los
privados y finitos; y personificando hasta las; abstracciones de la mente, todo
fue Dios, excepto Dios mismo. La segunda metamorfosis se debió a los esfuerzos
de la Razón para comprender el "Yo" en el caos de la Inteligencia y
la Intuición, así come las verdades materiales y contingentes; fue metafísica
y abstracta. La tercera, hija de la duda, para hallar la Verdad, reviso los
hechos y produjo la evidencia que trajo la certidumbre, y la Razón en su
energía pudo apreciar al hombre y al mundo como son en si; y es la científica
o positiva. La edad teológica alcanzó la perfección al proclamar un solo Dios
y la inmortalidad del alma; la metafísica al fundir las entidades primitivas en
la gran entidad, la Naturaleza; la positiva no llegara a su apogeo hasta que
consiga la demostración irrecusable de lo cierto en todo lo que interese a, la
especie humana.
Sap\ M\ :
¿Por qué se miran a veces como antípodas el Orden y el progreso H.'.. . .,
cuando deben ser inseparables?
RESPUESTA: Porque se ha definido simplemente al primero "el
conservador de la tranquilidad publica", y como todo orden Se modela por
una idea, y la de poder o Autoridad que somete a los pueblos a la obediencia
pasiva afianza en el gobierno a los tiranos, se ha creído desorden cuanto se
hacia para librar a las masas del envilecimiento.
Acabado el interrogatorio, dirá dirigiéndose al poderoso Rey:
Sap\ M\ :
¿Qué opináis, amigo mío, acerca de estos Candidatos?
Pod\ Rey: Que han respondido
satisfactoriamente, y me uno a vos para que sus méritos sean recompensados.
Sap\ M\ :
Pues si es así, acompañadme para que presten su juramento sobre esta espada.
HH\ Cap\ y Ten\
de Guardias, conducid a los candidatos.
Salomón e Hiram bajan del trono, se acercan al Altar: ponen los candidatos
la mano derecha sobre el triangulo y la espada de Salomón, quien dice.
Sap\ M\ : Repetid
conmigo.
Juramento
Yo... juro por mi honor y prometo en presencia del G\
A\ D\ U\
y de esta Respetable Audiencia de Maestros, no revelar jamás directa ni
indirectamente a nadie en el mundo los secretos de este grado de SECRETARIO
INTIMO; no hablar de ellos con ningún H\ que sea
inferior a él; no mostrar, sino al que de derecho corresponde, los libros,
papales y documentos que se me confíen; obedecer estrictamente las leyes que
nos rigen, someterme a los acuerdos de la mayoría de esta Audiencia o del
Soberano Capitulo Rosa Cruz a que pertenece, y utilizar mi curiosidad para
comprender las causas que producen las Miserias del Pueblo y la manera de
remediarlas. ¡Y antes que faltar a este juramento, quisiera que mi cuerpo fuera
dividido oblicuamente, y mis entrañas arrancadas para servir de pasto a las
bestias! ¡Que Dios me libre de ello!
¡Así sea!
El Sapientísimo Maestro levanta la espada sobre la cabeza de los graduandos
y dice:
Sap\ M\ : A
la G\ D\ G\
A\ D\ U\
etc., os creo, nombro y constituyo SECRETARIO INTIMO, MAESTRO FOR CURIOSIDAD o
MAESTRO INGLES y miembro de esta Audiencia.
Da seis golpes con el cetro sobre la hoja de la espada.
Sap\ M\ :
¡Sentaos, HH\ míos! y vos Gr\
M\ de Cer\ , servios traer
a Oriente a los neófitos para instruirlos!
Todos lo ejecutan y hecho esto dira el
Sap\ M\ : HH\
míos, el juramento sagrado que se os ha exigido, es el que presto Johaben y han
de hacer todos los Secretarios de los distintos grades de la Masonería; y la
pena que se impone es la que deben sufrir cuantos den comunicación de los
libros que encierran las actas y documentos, las columnas grabadas o los
balaustres que se confíen, las decisiones secretas de las Logias, Capítulos y
Consejos.
EL SIGNO DE ORDEN de este grado se hace cruzando los brazos delante del
pecho; en seguida se dejan caer manos sobre la espada, y se levantan los ojos al
cielo.
EL SIGNO DE SALUDO se ejecuta llevando la mano derecha al hombro izquierdo y
haciéndola bajar oblicuamente a la cadera derecha, en recuerdo del juramento.
EL TOQUE consiste en darse recíprocamente la mano derecha. El primero la
vuelve hacia fuera y dice la Primera Palabra de Pase, el segundo la vuelve hacia
dentro y dice la segunda palabra de Pase, aquel torna a volverla, y se dan
silabeando la Palabra Sagrada.
LA BATERIA consta de seis golpes iguales.
LA EDAD, veintiún años.
LAS PALABRAS DE PASE son... y.
LA PALABRA SAGRADA es...
Las palabras unidas significan "voto de alianza indisoluble". ¡H\
Gr.'. M.'. de Cer.'., conducidlos al Capitán y Teniente de Guardias para que
los examinen!
Después de hecho esto dice el
Cap\ de G\ :
¡Sap\ M\ , los signos,
toques y palabras son justos y perfectos!
Sap\ M\ :
¡H\ G\ M\
de Cer\ , proclamad en el circulo de esta Audiencia
de Maestros Secretarios Íntimos, Maestros por Curiosidad o Maestros Ingleses y
miembros de ella, a los hermanos...!
El G\ M\ de Cer\
hace la proclamación.
El Sap\ M\ cumplimenta
a los neófitos, aplaude y luego dice:
Sap\ M\ :
¡H\ Gr\ M\
de Cer\ , conducid a Oriente a los neófitos para
hacerles honor!
¡H\ Gr\ Orador,
tenéis la palabra!.
Este pronuncia su columna grabada; se le dan las gracias y se aplaude, se
despachan los negocios pendientes, se ofrece la palabra; se dan las gracias a
los visitadores y se circula la caja de asistencia.
Clausura de la Audiencia
Salomón da un golpe con el cetro, que repiten el Cap\
y el Ten\ de GG\ .
Sap\ M\ :
¿Qué edad tenéis, H.'. Capitán de Guardias?
Cap\ de G\ :
Veintiún anos, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ :
¿Por que esa edad, H\ Ten\
de Guardias?
Ten\ de G\ :
Por ser aquella en que, conociendo los principios que deben regir nuestras
acciones y sus resultados, somos completamente responsables del ejercicio de los
derechos y del cumplimiento de los deberes que nos ligan con los demás hombres.
Sap\ M\ :
¿A que hora debemos proceder a la clausura de los trabajos, H\
Cap\ de Guardias?
Cap\ de G\ :
A las nueve de la mañana, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ :
¿Que hora es, Teniente de Guardias?
Ten\ de G\ :
Las nueve en punto, Sapientísimo Maestro.
Sap\ M\ : HH\
Cap\ y Ten\ de G\
, servios anunciar que ha llegado la hora de cerrar nuestros trabajos, y que es
mi intención ejecutarlo.
Se hace el anuncio, el Sapientísimo Maestro da seis golpes con el cetro, que
repiten el Capitán y el Teniente de Guardias, y dice:
Sap\ M\ :
¡En pie y al orden, hermanos míos!
Todos lo ejecutan.
Sap\ M\ :
¡A la G\ D\ G\
A\ D\ U\
etc., declaro cerrados los trabajos de esta Audiencia! ¡A mi hermanos!
¡Por el signo!
Todos saludan.
¡Por la batería!
La dan diciendo
Todos.: ¡Hoshea, Hoshea, Hoshea!
Sap\ M\ :
¡Id en paz hermanos; pero antes jurad dar silencio acerca de todo lo ocurrido
en la presente
¿Lo juráis?
Todos: ¡Lo juro!
Y se retiran en silencio.